Autopoietican - Apuntes de Musica Progresiva Contemporanea
Hoy es la ocasión de fijar nuestros ojos en la localidad argentina de Rosario para que nuestros oídos se topen con DÁNAE, cuarteto instrumental formado a fines de los 70s bajo las referencias de RUSH, YES, LED ZEPPELIN, JEFF BECK y sus connacionales de CRUCIS, TANTOR e INVISIBLE. El grupo se hace notar en no poca medida por sus entusiasta explotación de la dinámica compartida por sus duales guitarras, y también por aventurarse con variables desarrollos rítmicos en sus ideas musicales. Hasta ahora, lo único que tenía este grupo en su haber era un disco homónimo auto-producido que data de 2004; en este año 2013, DÁNAE está engalanando nuestros oídos con su segundo disco “Medusa”, el cual será pronto editado por el sello Viajero Inmóvil (estamos escribiendo esto antes de llegar al ecuador de setiembre). La formación actual de DÁNAE contiene a Pablo López y Marcelo López a las guitarras, Willi Torres al bajo y Roberto Ferraris a la batería: o sea, conserva a sus tres instrumentistas a las cuerdas y cuenta con un nuevo baterista que reemplaza a Sergio Schegtel.
Ocupando los primeros 6 minutos del álbum, ‘Aproximación’ pone toda la carne el asador respecto a lo que es la expresividad pura del vigor rockero que siempre ha sido esencialmente típica de DÁNAE, pero lo hace al servicio de un desarrollo temático que enfatiza atmósferas contemplativas y arreglos fastuosos muy propios del estándar progresivo. A continuación, ‘De Regreso A Las Fuentes’, pieza cuya duración se extiende hasta los 6 ¾ minutos: en líneas generales, su dinámica es muy semejante a la de ‘Aproximación’, pero en su caso particular, se nota que hay un mayor énfasis en la explotación de los matices vibrantes de las secciones más intrépidas de la ilación temática. Tras este excelente tándem de apertura llega ‘Fuegos Cruzados’, pieza que puede muy bien describirse como una erupción de lava rockera estilizadamente articulada bajo una arquitectura rítmica sólida y elegante: los ornamentos de bajo muestran una talante cercano al discurso del jazz, lo cual sirve para enriquecer el swing y aumentar el colorido ya aportado por los riffs y solos de las guitarras duales. Cuando llega el momento de ‘Golpe Bajo’, DÁNAE concretiza una estupenda cruza de RUSH (etapa de “Fly By Night”) y YES, con toques añadidos a lo IRON MAIDEN: la relativa sencillez del desarrollo temático es manejada con una inteligente remodelación que le permite adquirir una oportuna aureola de sofisticación en este arreglo final. Por otra parte… ¿a qué se debe que la pieza no sea un poco más extensa? Arrojamos esta pregunta porque su atractivo daba para una exploración más extensa, en nuestra humilde opinión, pero bueno, el disco sigue adelante y queda más por disfrutar a nuestras anchas.
‘La Isla De Séfiro’ es una notable muestra de rock con gancho y sofisticación a la vez: se puede definir como una cruza del JEFF BECK de “Guitar Shop”, el estándar de TRIBAL TECH y el viejo RUSH de los 70s, más algún factor a lo THIN LIZZY por ahí. Durando casi 7 ½ minutos, ‘Los Siete Estados’ se erige en el tema más largo del disco. La ilación de sus variantes temáticas porta una aureola de rigurosa sofisticación, propia del RUSH 70ero, y a veces remitiéndonos a una especie de “LED ZEPPELIN Yessiano”. La precisa y preciosista amalgama de los instrumentos completa el potencial de consistencia que tienen las bases melódicas que van transcurriendo, las cuales son, en general, bastante sencillas en su elaboración básica. El tema homónimo ocupa los últimos 5 ¾ minutos del disco, aplicando una sensibilidad melódica más pronunciada que en a pieza inmediatamente anterior y proyectándose hacia un vigor más explícito, mientras mantiene la misma aureola de exquisita sofisticación: podemos muy bien describir a ‘Medusa’ como una retoma híbrida de los ambientes y grooves principales de ‘Golpe Bajo’ y ‘De Regreso A Las Fuentes’. En general, esta dupla de ‘Los Siete Estados’ y ‘Medusa’ sustenta de forma contundente y rotunda el innegable sentido épico que caracteriza a la ideología musical de DÁNAE.
En conclusión, tenemos en “Medusa” un estupendo ejemplo de cómo se hace música progresiva con garra y urgencia, apelando a muchos de los patrones de excelencia del género sin renunciar a la vitalidad visceral de lo rockero. DÁNAE merece una recomendación sin reservas para el público progresivo actual, probando hasta nuevos niveles de saciedad que Sudamérica es una fuente continua de grandeza artística para beneficio del susodicho género.
Muestras de “Medusa”.-
[Un agradecimiento especial para Willi Torres por presentarme el material del nuevo disco por anticipado]